Parecidos
Qué lejos cae la lluvia del desierto. La transparencia gris de la ventana y el reflejo tenue de un hombre otoñal que mira al vacío, desenfocado de verdes. Eso queda. El cielo devuelve mis lágrimas porque Dios no pudo hacer nada.
Debo comprender a Dios. El me hizo idéntico y probablemente tengamos los mismos defectos. Suelo pedir demasiado aún cuando olfateo que no voy a conseguir nada. Corazón duro y cabeza blanda tal vez?
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