MILAGRO DE NOVIEMBRE

Sencillo milagro de noviembre.
Con palabras suaves. Con el fuego tibio.
Con la piel ansiosa por dar el aroma de la sangre.
Y la boca abierta para la lucha de los besos
que buscan el abismal filo de los labios.
Una caricia tiene la densidad de las resinas
Y puede sacar el molde de tu cuerpo.
Un jadeo es una alquimia conjurada
Para extraer del alma los metales preciosos.
Los vórtices se inundan en cada respiro
El amor va por caminos sin huellas.
Un machetazo en la espesura
Funda rios de sangre verde.
Un rasguño selvático,
El zarpazo de una bestia rompe una colmena
Y derrama la miel sobre la cama.
Latigazo indoloro que sacude las cumbres celestiales
Y un deshielo se prolonga hacia el infinito.
La esencia misma de la persona entera
Desciende río abajo entre las piedras.
¡ Qué perfecta luz encierra una gota de rocío!
Cabe una porción del universo en ese sitio.
La gravedad no existe,
Cuando el amor se devuelve al cielo
Y echa raíces al mismo tiempo.

Escrito en Villa de Mayo, Provincia de Buenos Aires.