CIGARRO MALO
En los paquetes de cigarrillos, por imperio de la ley , las tabacaleras imprimen la leyenda “ fumar es perjudicial para la salud “. Esta muy claro que si no fuera por la ley, las tabacaleras no lo pondrían.
Por otra parte, hay una poderosa inversión en publicidad invitando a perpetuar la pasión por el pucho urgando en los vericuetos del yoismo de la egolatría implícita o explícita...despiertan los instintos escondidos de los tímidos que se sienten ganadores con un cigarrillo en la mano y de los audaces que se creen más guapos y atractivos tirando el humo en innumerables formas acrobáticas en los alrededores de una dama . La publicidad esgrime argumentos vinculados a la libertad , a la autoestima, al poder, alnivel social, a la sensualidad, al erotismo para perfilar el estilo de cada fumador segun la marca. Segun estos criterios , unos viven entre la velocidad de los autos de carrera y otros no bajan de los yates.
Paises como Inglaterra, del llamado primer mundo, invierten 900 millones de dólares anuales en salud para paliar el daño que el cigarrillo produce en los ciudadanos que se atienden en los hospitales públicos con las más diversas enfermedades, desde las bronco-respiratorias al cáncer. El gobierno holandés decidió aplicar un impuesto extra a los fumadores para su seguro de salud.
Pero el cigarrillo sigue, como las enfermedades que desencadena, produciendo nombres nuevos y formatos de todo color y presentación.
Se hacen lugares especiales en los trenes, en los restaurantes , en los hoteles para que los fumadores puedan dar rienda suelta a su vicio , y sea legítima su humareda que no respeta límites arbitrarios.Será siempre un lucha desigual mientras el Estado no valore la salud de la población más álla de la declamación preventiva. No hace falta el cigarrillo para vivir , y su perdurabilidad en el tiempo social está vinculado al volumen impositivo que reditúa para las arcas publicas.
Pero para no contradecir a los defensores del libre albedrío y dar la razon a los abanderados de la libre empresa y del estado cautivo...aliento a los fumadores empedernidos a seguir desmejorando su salud a raudales , con filtro y sin filtro...los invito a superar dia a dia la cantidad de cigarrillos como una muestra individual de resistencia física y buena madera genética...fumar no es para cualquiera...y tener agujeros en los pulmones es similar a una heroica herida de guerra en defensa del pensamiento propio...
Si está fumando un paquete ... fume dos, y si fuma dos, fume tres por dia.
Es aupicioso saber , que en algunos años, no necesitaremos radiografías para ver sus huesos.
Por otra parte, hay una poderosa inversión en publicidad invitando a perpetuar la pasión por el pucho urgando en los vericuetos del yoismo de la egolatría implícita o explícita...despiertan los instintos escondidos de los tímidos que se sienten ganadores con un cigarrillo en la mano y de los audaces que se creen más guapos y atractivos tirando el humo en innumerables formas acrobáticas en los alrededores de una dama . La publicidad esgrime argumentos vinculados a la libertad , a la autoestima, al poder, alnivel social, a la sensualidad, al erotismo para perfilar el estilo de cada fumador segun la marca. Segun estos criterios , unos viven entre la velocidad de los autos de carrera y otros no bajan de los yates.
Paises como Inglaterra, del llamado primer mundo, invierten 900 millones de dólares anuales en salud para paliar el daño que el cigarrillo produce en los ciudadanos que se atienden en los hospitales públicos con las más diversas enfermedades, desde las bronco-respiratorias al cáncer. El gobierno holandés decidió aplicar un impuesto extra a los fumadores para su seguro de salud.
Pero el cigarrillo sigue, como las enfermedades que desencadena, produciendo nombres nuevos y formatos de todo color y presentación.
Se hacen lugares especiales en los trenes, en los restaurantes , en los hoteles para que los fumadores puedan dar rienda suelta a su vicio , y sea legítima su humareda que no respeta límites arbitrarios.Será siempre un lucha desigual mientras el Estado no valore la salud de la población más álla de la declamación preventiva. No hace falta el cigarrillo para vivir , y su perdurabilidad en el tiempo social está vinculado al volumen impositivo que reditúa para las arcas publicas.
Pero para no contradecir a los defensores del libre albedrío y dar la razon a los abanderados de la libre empresa y del estado cautivo...aliento a los fumadores empedernidos a seguir desmejorando su salud a raudales , con filtro y sin filtro...los invito a superar dia a dia la cantidad de cigarrillos como una muestra individual de resistencia física y buena madera genética...fumar no es para cualquiera...y tener agujeros en los pulmones es similar a una heroica herida de guerra en defensa del pensamiento propio...
Si está fumando un paquete ... fume dos, y si fuma dos, fume tres por dia.
Es aupicioso saber , que en algunos años, no necesitaremos radiografías para ver sus huesos.
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